Fragmento del artículo comentado en la sesión
“Es evidente, la tecnología nos exige tomar decisiones éticas casi a diario, unas más cotidianas y otras más trascendentales, aquellas que pueden afectar a la vida de millones de consumidores… En este contexto de cambio acelerado, generador de progreso pero también de incertidumbre, la ética humanista está recobrando el protagonismo como asidero y como mapa para guiarnos en nuestras profesiones y en nuestra vida diaria.”
Expansión
Impresiones de la sesión
Rondaban
las siete de la tarde cuando, de nuevo, nos veíamos reunidos ante la mesa de
debate de nuestro Club, Articularia; que si no fuera porque somos mujeres y
hombres de paz, pareceríamos las mismas damas y caballeros de la mesa redonda,
en nuestro caso rectangular y alargada. Ese día, al frente y encargado del
ritual, como el mismísimo gran maestre celebrante de la Orden, estaba José Ángel.
No sólo no nos defraudó, sino que nos llenó de regocijo.
Esta vez
la cosa versaba sobre la incidencia tecnológica en la evolución de la sociedad
actual, con el pomposo título de "Humanismo Digital", de Luis Pardo
Céspedes, experto en administración y gestión de empresas. El autor nos pone en la
tesitura de enfrentarnos a la compleja situación en la que nos sitúa la
tecnología digital, "y que en el actual contexto de cambio acelerado, la
ética humanista recobra protagonismo como asidero y guía profesional". En
todas estas cuestiones nos fue introduciendo, de manera magistral y con muy
acertados argumentos, José Ángel, que resaltó de forma especial el reto que
supone, tanto para la competitividad de las empresas, como para las nuevas
recalificaciones profesionales.
El
proceso de debate fue como siempre de lo más polar y entretenido. Hubo
quien puso en tela de juicio, aunque con no muchos argumentos, la solvencia y
competencia del autor, considerando que no era de extrañar lo flojo del artículo dada la limitada valía científica de su autor. Algún otro opinaba sobre el
acierto en la elección tanto del artículo como del autor. Y aunque esta opinión
parecía más sólidamente representada, nuestro debate volvió a demostrar que
"hay salsa para todos los gustos".
En este
sentido hay que tener presente que el autor creció en una familia con cultura
de pequeños y medianos empresarios y esa herencia marcó su carrera profesional.
Actualmente es presidente del Consejo de Sage en España, multinacional líder
mundial en software de gestión de empresas. Ante el reto que supone la
presencia de la tecnología emergente en todos los ámbitos laborales, alguno
apuntó el hecho de que siempre ha habido cambios y no ha pasado nada. Pero el
temor tiene su razón de ser en aspectos como el posible acceso fraudulento al ‘big
data’, la ciberseguridad, la posibilidad de que las máquinas puedan tomar sus
propias decisiones en lo que se denomina la ‘inteligencia artificial…
También
se habló de que el término “Humanismo digital” es ambiguo. Si es digital no
puede haber humanismo. El término tiene dos acepciones; una sería la
divulgación del humanismo por medio de la tecnología actual y otra la
aplicación del humanismo en las nuevas tecnologías, que es la acepción de la
que trata el artículo que estamos comentando.
En este
entorno hablamos de la figura del “humanista digital” como la persona encargada
de conducir a su organización a un nuevo nivel de automatización y gestión, a
la llamada industria 4.0. Éste debe conocer además las tecnologías emergentes
actuales, como el internet de las cosas, cloud computing, inteligencia
artificial, robótica colaborativa, blockchain, etc.; y aspectos menos
cuantificables e intangibles en los que las disciplinas humanísticas tienen
mucho que decir.
Hay que
destacar, dentro de la importancia que el autor concede a la nueva forma de entender
la figura del líder como “promotor de las habilidades blandas", el resumen que
él mismo hace del artículo, en el siguiente texto:
"Si
tuviéramos que resumir lo dicho hasta
aquí sobre los retos y las oportunidades que nos plantea la perspectiva del
humanismo digital, "liderazgo" y "optimismo" serían dos
buenos conceptos. Sobre el primero decía el pensador Peter Drucker que la
"excelencia de un líder se mide por su capacidad para transformar los
problemas en oportunidades"; sobre el segundo, Winston Churchill afirmó
que "el pesimista ve una dificultad en cada oportunidad, el optimista ve
una oportunidad en cada dificultad"..."
Y sí que parece que caló, salvo
en alguna muy contada excepción, esta nueva concepción de la figura del líder,
más como coordinador de recursos, facilitador de sinergias y motor de
motivación, que como aguerrido implantador del ordeno y mando. En este punto
hubo quien defendió la tradicional figura del jefe, en detrimento de la del
líder, como más adecuado para la gestión del personal.
Y en esas andábamos, cuando la
firme voz, conocida por todos, nos informó, desde las ondas, que se nos había
terminado el tiempo del debate oficial; y así comenzaba la tertulia clandestina
frente al verdejo...
Luis Pardo Céspedes (Barcelona, 1968-)
Empresario y escritor, es experto en liderazgo y nuevas
tecnologías así como su aplicación a la pequeña y mediana empresa. Desde 2014
es CEO y Vicepresidente ejecutivo de Sage Iberia. En 2018 ha recibido la
Medalla de Oro al Mérito en el Trabajo, de la Asociación Europea de Economía y
Competitividad. Es experto en management y su ejercicio del liderazgo como CEO
de Sage Iberia fue reconocido con el premio al "CEO del Año" por el
diario La Razón en 2017.
Experto en desarrollo tecnológico en las medianas y
pequeñas empresas (PYME), defiende "que la primera palanca del crecimiento
de una empresa en el siglo XXI es la innovación y en este caso, la innovación
tecnológica.
Luis
Pardo es una de las primeras voces en hablar de humanismo digital en España y
plasma su visión optimista y fundamentada sobre los efectos de la Cuarta
Revolución Industrial en su libro ‘Viaje al centro del humanismo digital’,
convencido de que con voluntad y ética la tecnología será nuestra mejor aliada
para conseguir mundo mejor y más próspero
Animamos a participar a todo el que quiera hacer un
comentario sobre este tema
1 comentario:
Recoge esta intervención de Maria sobre el debate que nos quiere hacer llegar a todos:
4 puntos sobre el debate pasado.
1 Abuso de conceptos arcaicos y viejunos. Términos q pasan por nuevos y modernos...q suenan mejor.
2 Falta total de definiciones y clasificaciones. Estupefacta estoy aún, con lo de «habilidades blandas» ???? (recuerdo a un «coaching» ,hace unos 18 años presentarse con una pelota de fieltro y un bate, al darnos un curso sobre esa cosa de las «habilidades blandas»...)
O sea : rigor, rigor y rigor.
Como empresario q es, según su curriculum, hubiese sido normal q, en vez de hacer teoría ( el papel lo aguanta todo..), hubiese expuesto resultados de la aplicación de esas recetas q da a los resultados de su empresa.
Por ejemplo : q ha supuesto la aplicación de la «inteligencia emocional» ????.Q criterios, q parámetros ha seguido en su aplicación. En q ratio lo coloca ?
Es lo q hacen los empresarios.
O sea : datos, datos y datos.
4 Todo lo demás es charlatanería, metafísica..y buenos deseos q , no dudo q tenga. Muy rentables, eso sí, pero q a nivel empresarial, son absolutamente irrelevantes.
Un saludo.
Maria
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