martes, 19 de octubre de 2021

 CLUB DE PRENSA "ARTICULARIA"

 Año VII. Temporada 2021-2022

2ª Sesión: "La Aurora Roja" / Julio Camba. El País, 25 de Febrero de 1905.

         

           Ponente: Alejandro. 05 de Octubre de 2021.

El Autor:

Julio Camba nació en Vilanova de Arousa el 16 de diciembre de 1884. Siendo casi un niño se embarcó como polizón rumbo a Argentina, de donde fue expulsado por sus actividades revolucionarias, con las que continuó a su regreso a España. Colaboró en Tierra y Libertad en su etapa como diario y posteriormente fundó El Rebelde, notable periódico de ideas anarquistas en el que colaboró, entre muchos otros, Piotr Kropotkin.

Acosado por las autoridades y apretado por las dificultades propias de una empresa de este tipo, cerró El Rebelde, se fue alejando de su «aventura juvenil» y su firma empezó a dejarse ver en otros periódicos de la época como El País, España Nueva, El Mundo o El Sol, hasta llegar a ABC.

Recogió sus columnas y crónicas de viajes en libros como Alemania, Londres, Sobre casi nada, Sobre casi todo o La ciudad automática, volúmenes que fueron muy apreciados por los lectores de su época. De entre todos sus títulos destaca Mis páginas mejores, antología preparada por él mismo en los años cincuenta —y reeditada en Pepitas en 2012— que recoge lo mejor de su producción literaria. Muchas de sus páginas constituyen auténticas obras maestras por su ingenio y por su estilo.

Su particular alineación con el franquismo y el hecho de haberse dedicado a un género considerado menor —la columna periodística— hacen que Camba sea todavía un gran desconocido para muchos lectores.

En 1949 se instala en la habitación 383 del hotel Palace de Madrid hasta su muerte, el 28 de febrero de 1962.

Obra que recoge el artículo.


«¡Oh, justo, sutil y poderoso veneno!».- Los escritos de la Anarquía

«Camba era el logos, la más pura y elegante inteligencia de España».—José Ortega y Gasset

Reunimos en este volumen lo más significativo de la escritura de Julio Camba entre 1901 y 1907: unos textos que redactó entre los dieciséis y los veintidós años y que muestran el camino recorrido —a ambos lados del Atlántico— por un joven dotado con un talento innato para contar lo que pasa a su alrededor y con la férrea voluntad de intervenir en la realidad que lo envuelve. Un joven de una precocidad pasmosa que en esos momentos ya cuenta con grandes vivencias a sus espaldas y que, como otros muchos de sus contemporáneos, había caído bajo el influjo de las ideas individualistas de Max Stirner y de Friedrich Nietzsche.

Sin embargo, esta no es una recopilación al uso de textos de Camba, ya que en ella se incluyen muchos de los escritos que las reglas de lo políticamente correcto y de lo literariamente aceptable —que vienen a ser las mismas— han proscrito de las antologías. Textos en muchos casos de combate, de un desatado fervor, con una gracia inmensa y en los que siempre se hace gala de un saludable desdén por la autoridad.

Los escritos recogidos en este volumen fueron publicados originalmente en El Cuento Semanal, La Protesta Humana, Tierra y Libertad, El Rebelde, La Anarquía Literaria, El País y España Nueva, y una gran parte de ellos no habían sido reeditados hasta la fecha. Muchos de estos textos y publicaciones fueron perseguidos sin tregua por las autoridades, e incluso Camba llegó a pasar alguna temporada en prisión por ellos.

Este libro, además de una gran cantidad de textos «inéditos» —que estaban escondidos en archivos diseminados por medio mundo—, contiene numerosos documentos e informaciones que sin duda cambiarán el cliché existente sobre Julio Camba.

[Incluye 'El destierro']

[...] En realidad todos estábamos convencidos de que íbamos a hacer la Social, pero no teníamos prisa. La Anarquía nos había encantado a todos, porque la Anarquía era para nosotros, más que una concepción filosófica, un entretenimiento sentimental. En cualquier velada de teatro, en cualquier mitin o en cualquier manifestación pública, la Anarquía tenía expositores elocuentes, mujeres hermosas y canciones aladas; tenía un espíritu alegre, aventurero, cosmopolita, valiente, generoso y artístico; todo lo cual mantenía el entusiasmo de los viejos y suscitaba el de los jóvenes. «¡Oh, justo, sutil y poderoso veneno!», decía, hablando del opio, Tomás de Quincey. Justo, sutil y poderoso es también el veneno de la Anarquía, y ningún fumador de opio, ningún bebedor de ajenjo, ningún tomador de morfina ni de haschis, ha tenido sus sueños poblados de visiones más hermosas que las visiones que pueblan el gran ensueño anarquista. La Anarquía es también uno de los paraísos artificiales, y bien vale la pena visitar este paraíso cuando no se dispone de uno natural. [...]

Fuente: https://www.pepitas.net/autor/julio-camba

Impresiones desde Articularia:

La vida nos dió que José Ángel se tomara una vacaciones y faltase a esta segunda sesión por estar fuera de Burgos. Si el se hubiera presentado, como hubiese sido normal, hubieramos tenido que sortear quien se quedaba fuera, por que, con la vuelta de José y Marta, llegamos al tope que nos permite las restricciones contra la pandemia.

En esta segunda sesión, Alejandro ofició de Gran Maestro de Ceremonias. Como en el es habitual, nos regalo una lúcida y metódica presentación de la temática de la sesión. Departió con la sorprendente, aventurera y zigzageante vida del autor de turno, Julio Camba, quién desde su más tierna juventud -época del autor que nos interesa-, puso tierra de por medio para iniciarse en la más apasionante militancia ácrata, en unos tiempos en que hacerlo era riesgo y poesía.
Sobre el artículo, señaló como, con él, Camba quería rendir un respetuso homenaje a Pío Baroja, por la publicación de la obra que completaba la trilogía de este autor "La lucha por la vida", "Aurora Roja". En dicha obra se nos retrata un madrid suburbial, en pleno crecimiento por la emigración y en la que, algunos de los personajes destacados, evolucionan de la convivencia con el lumpen, al compromiso liberador y militante. En este marco social y literario, el autor gallego en su artículo, recoge las pinceladas humanas con las que Baroja nos presenta a sus protagonistas.
Trás la presentación con la que nos ilustró Alejandro, el debate como casi siempre estuvo de lo más animado; algunos soprendidos, con razon, por el solapamiento de autores, artículo y obra literaria se sintieron un tanto defraudados, de lo cual tomamos nota desde la coordinación para rectificar los errores cometidos desde la misma.
Por otro lado, algunos de los intervinientes, como muchos otros autores,  pensaban que esa fase, de la vida de Julio Camba, fue una fiebre de juventud carente de importancia y frente a ella ensalzan la etapa del Camba firma eselza del periódixo ABC, con habitación propia en el Hotel Palace de Madrid. Otros, sin embago, como se recoge en el libro recopilatorio señalado arriba, pensaban que fue un periodo muy rico y sorprendente, en un momento histórico decisivo.
Y en estas diatrivas andabamos envueltos, cuando de nuevo, se nos señaló desde los altavoces que se nos había terminado la sesión; recogimos y con esas nos fuimos para seguir departiendo, ahora delante de un vino.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Gracias a Luismi por su estupenda presentación escrita de la sesión y por la elaboración del estupendo blog de ARTICULARIA.
El texto de Julio Camba parte de una consideración sobre el ideal, las ideas y las acciones, que se referirán al anarquismo de principios del siglo XX en nuestro país. El ideal toma carne en Juan, protagonista de AURORA ROJA, en su entrega a la causa, en su grandeza de héroe (“Sólo lo libre es humano”, dice Juan). Confronta este personaje con otros tipos de anarquistas y en las acciones de estos, reflejo ambos de las gentes de ese tiempo.
Camba se recrea en el final de Juan, dulce y romántico (“Nunca he sido tan feliz...”, dice Juan), y nos manifiesta la melancolía, la incertidumbre, la presencia de hombres plenos de ilusión caminando hacia en porvenir... (“Fueron muchos, con sus ideas y acciones llenaron toda la vida”, dice el autor). Y Camba nos hace una pregunta inquietante: “¿Qué queda?” Y en el artículo podemos encontrar su respuesta: un recuerdo de todos contra todo y contra todos, ternura, belleza..., dignificar la vida con una bella ilusión.
Pero D. Julio no habla de obras concretas, de cambios sociales, realizadas desde la llama atormentada, que mueve a anarquistas a lograr la justicia y el amor. Sí habla de los hombres que se agrupan y luchan por el ideal que les lleva a LUCHAR POR LA VIDA.
Alejandro.